La Escuela de Relaciones Internacionales de la Facultad de Administración Pública de la Universidad de Panamá invitó al Licenciado Alonso E. Illueca, socio de nuestra firma de abogados, para que participara en calidad de conferencista en el Seminario «Problemas actuales del Derecho Internacional Público». El 20 de junio de 2018, el Licenciado Illueca expuso su conferencia «El problema de la armonización del principio de no intervención con el respeto de los derechos humanos».
La ponencia consistió en una explicación general del concepto de los derechos humanos, su rol dentro del sistema de las Naciones Unidas y los distintos órganos para su protección que existen a nivel universal. Posteriormente, analizó el principio de no intervención, recordando que el mismo es de origen relativamente reciente y que tiene su génesis en el dercho internacional latinoamericano (Doctrinas Calvo y Drago). Además, analizó el principio de no intervención a la luz de la Carta de las Naciones Unidas y la Carta de la Organización de Estados Americanos, así como su desarrollo por la Asamblea General de las Naciones Unidas mediante resolución 2625. Luego, repasó algunos casos de la Corte Internacional de Justicia que analizan el principio de no intervención, entre los cuales mencionó Actividades militares y paramilitares en y contra Nicargua, el relativo al Canal de Corfú. Igualmente, resaltó el carácter erga omnes de las obligaciones del Estado en materia de derechos humanos, tal como lo reconoció la Corte Internacional de Justicia en el caso Barcelona Traction.
Por último, basandosé en el criterio del Institut de Droit International concluyó que las medidas individuales o colectivas que tomen los Estados para garantizar la obligación de respetar, proteger y realizar los derechos humanos no pueden considerarse una intervención ilícita en los asuntos internos de otro Estado, siempre y cuando no incluyan el uso de la fuerza o la violación de norams fundamentales del derecho internacional. Igualmente, sustuvó que el respeto al principio de no intervención en su justa dimensión garantiza la observancia, el respeto y la pleana realización de los Derechos Humanos.
